Claves para prevenir los agentes patógenos en una planta alimentaria
La prevención de la existencia y difusión de agentes patógenos en una planta alimentaria es obligatoria de acuerdo con las actuales normativas y legislaciones en materia de seguridad.
A lo largo de toda la cadena alimentaria, desde la producción hasta que el propio producto se encuentra en manos del consumidor final, los protocolos deben aplicarse de manera detallada para preservar en todo momento la salud humana. A continuación exponemos cuáles son las mejores prácticas para conseguirlo.
Higiene personal en la entrada y salida de la planta alimentaria
En la industria del procesamiento de alimentos, tanto la entrada como la salida de la planta alimentaria representan dos momentos críticos. Los operarios podrían llevar consigo, en especial en su calzado y en su ropa, diferentes patógenos peligrosos. La limpieza no solo debe ser constante, sino que la higienización debe arrancar ya en los propios vestuarios, el lugar al que se accede desde la calle y el primer espacio en el que los trabajadores de la sala dejan ropa y calzado particulares.
Posteriormente, tanto los equipos de lavabotas como los pasos sanitarios ejercen de barrera efectiva contra la posible contaminación cruzada y la aparición de microorganismos peligrosos. En concreto, dispositivos como el paso sanitario integrado Sanieco WD Plus, una estación de higiene compacta fabricada para espacios pequeños, ofrece todas las garantías para ello. Al mismo tiempo que el operario está desinfectando las suelas de su calzado, se producen el lavado, el secado y la desinfección de manos.
Diseño higiénico de las instalaciones para prevenir los agentes patógenos en una planta alimentaria
La prevención de agentes patógenos en una planta alimentaria pasa por contar con un diseño higiénico de las instalaciones, que contemple todos los protocolos de limpieza y seguridad. Impedir que haya agentes patógenos en los productos alimentarios, evitar el riesgo de contaminación y garantizar la desinfección adecuada de las manos, la ropa y el calzado de los operarios es clave para asegurar que se cumplen las demandas de bioseguridad.
Las instalaciones correctamente diseñadas y bien mantenidas son una parte crítica en la seguridad alimentaria junto con el uso de equipos adecuados y las buenas prácticas del personal. El diseño correcto debe suponer una protección efectiva y real frente a peligros tales como plagas y microorganismos, así como una barrera ante productos químicos y partículas provenientes del aire exterior. Además, debe ser inaccesible para personal no autorizado o que no haya cumplido con los protocolos higiénicos de acceso.
La misma concepción con la que son diseñados y fabricados los medios que se usan para manipular alimentos incide en la seguridad y la prevención de agentes patógenos, y esto incluye, de manera directa, a las instalaciones.
Agencias internacionales
Los principios básicos de diseño higiénico para instalaciones de manipulación de alimentos están recogidos en la Directiva 98/37/EC y el Reglamento 852/2004/CE. Agencias internacionales como la National Sanitation Foundation International (NSF), el European Hygienic Engineering and Design Group (EHEDG) o la A3 Sanitary Standards Inc. (A-3 SSI) recogen las especificaciones de cómo deben ser los espacios en cuanto al diseño higiénico.
Características de cada espacio
Es importante considerar que cada instalación debe ajustarse a las necesidades particulares de cada caso. Por eso Roser Group, líder mundial en diseño y fabricación de maquinaria, equipos e instalaciones destinados a la industria alimentaria, crea líneas productivas y proyectos a medida, para adaptarlo a los requerimientos de cada cliente.
Buenas prácticas de manipulación
En cuanto a las buenas prácticas de manipulación para una higienización constante y correcta, es importante que los operarios estén bien formados en buenas prácticas de actuación y sean supervisados, para evitar posibles errores que puedan tener consecuencias peligrosas.
Buenos ejemplos de equipos que facilitan la manipulación industrial son dispositivos como el contenedor volcable de 600 l. con pies o ruedas Mod. CVR-1 de Roser Group, de extraordinaria resistencia, apilable y de manejo sencillo.